Directivo de Uniautónoma renuncia por graves adulteraciones en actas
Orlando Abello dice que a Ramsés Vargas nunca le aprobaron aumento en el sueldo de 20 millones mensuales, ni le dieron autorizaciones para contratos y otras disposiciones.
José Granados Fernández
Actas que “riñen de forma grave con la verdad” de lo sucedido en las reuniones de la Sala General de la Universidad Autónoma, porque en ellas aparecen autorizaciones que, al parecer, nunca fueron presentadas, estudiadas, discutidas y aprobadas al exrector Ramsés Vargas Lamadrid, llevaron al directivo y expresidente de ese órgano de gobierno, Orlando Abello Martínez-Aparicio, a renunciar irrevocable a sus cargos en esta institución.
En cartas enviadas el pasado miércoles a Jesús Pantoja Mercado, secretario general de la Uniautónoma, señalado de ser uno de los alfiles del exrector Ramsés Vargas en el entramado de hechos irregulares que investigan el ministerio de Educación y la Fiscalía General, el exdirectivo Abello pone en duda y rechaza que muchas de las cosas que dicen las actas hayan sido aprobadas, como por ejemplo hacer contrataciones y otras disposiciones administrativas y financieras.
Las actas de la Sala General a las que se refiere Orlando Abello son la 201 del 18 de octubre de 2016; la 203 del 20 de junio de 2017 y la 202 del 21 de diciembre de 2017, así como las actas del Consejo Directivo 837 del 18 de octubre de 2016; la 838 del 21 de diciembre de 2016 y la 839 del 20 de junio de 2017.
En sus cartas a Pantoja, Abello no solamente refuta lo que dicen los documentos elaborados por el ahora cuestionado Secretario General, sino que, además, le reclama por haberle entregado las actas “de manera inexplicablemente extemporánea”, pese a las solicitudes que le hizo varias veces, lo que indicaría que Pantoja estaba ocultando los presuntos contenidos fraudulentos otorgándole a Ramsés Vargas facultades nunca autorizadas.
En una de las cartas del exdirectivo Orlando Abello, conocidas por Emisora Atlántico y Zona Cero.com, este refuta el contenido del Acta 839, en la que hay una decisión que dejó perplejos a funcionarios del Ministerio de Educación cuando la leyeron, pues, además de un generoso aumento de sueldo supuestamente otorgado a Ramsés Vargas, los directivos habrían cometido una extralimitación de funciones.
El acta señala que fue el secretario Jesús Pantoja quien propuso reajustar el salario del rector Vargas porque, supuestamente, desde su nombramiento en mayo de 2013 no le habían hecho ningún aumento. El documento reseña que Vargas Lamadrid se retiró de la sesión para no interferir en la decisión a tomar.
Tras revisar el acta, Abello manifiesta que hasta ahí es correcta la redacción. Sin embargo, a renglón seguido le reclama a Pantoja porque “omitió consignar” que el Consejo Directivo “solo se limitó a aprobar el estudio y cálculo del incremento del salario” del rector, para lo cual, advierte Abello, fue designada una comisión, integrado por Pantoja y dos dignatarios -cuyos nombres no recuerda-, para que calcularan el monto del incremento salarial a aprobarse.
Paralelo a esta omisión, en el Acta 839 surgieron más sorpresas. Cuestiona Abello que el secretario Jesús Pantoja haya escrito que se abrió la deliberación sobre el reajuste del salario del Rector y que él preguntó qué directivos se encontraba inhabilitados para decidir.
En el documento el secretario Jesús Pantoja escribió que cada directivo respondió que no estaba impedido y, para mostrar una aparente transparencia, consignó que los que sí se declararon impedidos fueron los familiares de Ramsés, es decir su papá Eduardo Vargas Osorio, su prima Mónica Patricia Vargas Cormane, su esposa María Helena Hernández Barrios, su otra primera María Cristina Vargas Cormane, su mamá Sonia Lamadrid de Vargas y su tío Álvaro Vargas Osorio.
Recalca Orlando Abello que en la página 8 del Acta 839, el secretario Pantoja dice que al abrir la votación sobre la proposición de reajustar el salario de Ramsés Vargas fue “aprobada por unanimidad” y que el Consejo Directivo le incrementó el sueldo en $20.000.000 mensuales; señala que de paso le incrementó en 4.000 dólares la bonificación autorizada el 5 de junio de 2015 (para un total de 26.000 dólares mensuales) “con efectos retroactivos a partir del 01 de junio de 2017...”.
Con ese aumento el sueldo de Vargas Lamadrid pasó a $67.062.856 mensuales.
“Al respecto manifiesto mi oposición a lo consignado por el señor secretario en el acta en comento, porque riñe con la verdad de lo sucedido”, enfatiza el exdirectivo Orlando Abello. Y concluye: “Frente a la presente redacción manifiesto que los hechos relatados no corresponden a la realidad de lo allí sucedido, por cuanto en el desarrollo de tal sesión no hubo tal receso, ni tal redacción, ni tal discusión, ni tal aprobación del acta en mención”.
Sobre las actas 201, 202 y 203 de la Sala General, en las que supuestamente a Ramsés Vargas le confirieron “autorizaciones y facultades para contratar y ejercer actos dispositivos”, Orlando Abello hace las mismas denuncias: esos temas nunca fueron incluidos en el orden del día, ni dichas decisiones fueron discutidas ni sometidas a consideración y mucho menos aprobadas.
El ex directivo de la Uniautónoma pidió al secretario Jesús Pantoja que estas denuncias sean enviadas a la nueva presidenta de la Sala General, la periodista Sandra Devia, para proceda a dar traslado a las autoridades que considere pertinente ante la gravedad de los hallazgos.